Demos gracias a Dios por todas las personas que dan su vida para sanar a nuestra madre Tierra. Un hombre del sur de Senegal, Adama Diémé, inició un ambicioso proyecto de plantación de cinco millones de árboles en los próximos cinco años. La idea surgió cuando regresó a la región de Casamance tras unos años trabajando en Europa. Le chocó que en pueblos que en su juventud estaban poblados por cientos de árboles gigantescos, quedaran pocos. Adama es ahora gestor de proyectos para una ONG española e imparte formación agrícola, contribuyendo así a cambiar la realidad de su región. En los últimos tres años, más de 142.000 plantones han sido cuidados y han echado raíces. Que Dios dé fuerzas a Adama para continuar con su labor.

USGI -Roma